El mundo de la NFL ha recibido una sacudida inesperada: Micah Parsons ha solicitado públicamente un traspaso de los Dallas Cowboys. La estrella defensiva no solo es uno de los jugadores más dominantes de la liga, sino también una figura central en cualquier equipo con aspiraciones al título.
Su decisión ha activado las alarmas entre los contendientes, y varios gerentes generales ya analizan cómo hacer espacio para un talento generacional como él. Entre los equipos que podrían dar el paso definitivo, hay uno que destaca como la opción más lógica y peligrosa.
¿Por qué Buffalo Bills sería el destino ideal?
La conexión entre este equipo y Parsons no es solo una fantasía de los aficionados. Según Mike Florio, de Pro Football Talk, los Buffalo Bills y los Baltimore Ravens son los candidatos más lógicos para un posible traspaso. Ambos son contendientes serios en la AFC y tienen un mismo objetivo: superar a Patrick Mahomes y los Kansas City Chiefs.
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En el caso particular de Buffalo, los argumentos son contundentes. Con Josh Allen liderando la ofensiva, los Bills cuentan con una de las mejores estructuras de la liga. Su defensa, ya de por sí sólida, podría alcanzar un nuevo nivel con la llegada de Parsons.
El linebacker ha sido cuatro veces Pro Bowler y tres veces All-Pro, acumulando 52.5 capturas en sus primeras cuatro temporadas. Su presencia agregaría una dimensión completamente diferente al front-7. Imaginar una línea defensiva con Parsons, Ed Oliver, Joey Bosa y Gregory Rousseau, respaldada por un linebacker del calibre de Matt Milano, es pensar en una pesadilla para cualquier ofensiva rival.
Además, la versatilidad de Parsons (capaz de alinearse en distintas posiciones y presionar desde cualquier ángulo) le ofrecería al coordinador defensivo Bobby Babich una flexibilidad de esquemas que no ha logrado implementar aún.
El gran obstáculo: el límite salarial
A pesar de que el encaje deportivo es casi perfecto, existe un problema difícil de ignorar: la situación financiera de los Bills. Actualmente el equipo se encuentra por encima del tope salarial, lo que haría muy complicado absorber los 24 millones de dólares que Parsons ganaría en 2025.
Aun así, los expertos no descartan la operación. Si Parsons estuviera dispuesto a aceptar una estructura contractual inusual, con bonificaciones diferidas o cláusulas especiales, el traspaso podría ser factible a corto plazo.
Sin embargo, el verdadero desafío sería asegurar su continuidad. Se espera que Parsons firme una extensión de contrato de al menos cuatro años y más de 160 millones de dólares, una cifra que obligaría al gerente general Brandon Beane a hacer malabares financieros, especialmente considerando que Buffalo ya proyecta estar por encima del tope salarial en 2026.
🚨 Developing 🚨
— Due Champions (@DueChampions) August 2, 2025
Micah Parsons and his agent revealed four desired trade destinations. The #Bills are one of those four teams. Let us know in the comments what you would give up for Parsons
Per: @PolymarketBlitz #Due | #BillsMafia | #MicahParsons pic.twitter.com/ZshKW71Ly3
Una apuesta total por el Super Bowl
A pesar de los obstáculos, la posibilidad está sobre la mesa. La gerencia de los Bills ha demostrado estar dispuesta a tomar riesgos si eso significa acercarse al trofeo Vince Lombardi. Con Josh Allen en el mejor momento de su carrera, la ventana de oportunidad está completamente abierta.
Sumar a Micah Parsons no sería solo una mejora deportiva: sería una declaración de intenciones. Sería el movimiento que podría marcar la diferencia entre una nueva temporada prometedora y, finalmente, el tan ansiado campeonato.
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